ENTREVISTA CON BERT HELLINGUER

Bert Hellinger:
Los Destinos de la Familia de Origen

Por Marta Magazian

Bert Hellinger nació en Alemania. Estudió filosofía, teología y pedagogía. Durante 16 años, trabajó como misionero de una orden católica en Sudáfrica. Más tarde, se hizo psicoanalista y llegó a desarrollar su propia terapia sistémica y familiar. Su método de configurar constelaciones familiares enfocado directamente hacia la solución le valió el reconocimiento como uno de los terapeutas claves del mundo psicoterapéutico actual.

Enfermedad y Familia de Origen

¿Cómo se determina si hay enfermedad en una familia?


A través de las constelaciones familiares, se ha puesto de manifiesto que muchas de las enfermedades están relacionadas con algún hecho ocurrido en la familia; por ejemplo, que haya habido un desorden en la familia. Es importante tener en cuenta que la familia como un todo se comporta como si dependiera de un alma grupal o mayor, y ésta sigue un orden. Cuando hay un desvío de ese orden, un miembro se aparta y, a menudo, hay alguien en la familia que se enferma.


El primer orden que rige a esta alma y que obliga a que realmente se cumpla dicho orden es que cada miembro de la familia tiene el mismo derecho a pertenecer, es decir, que si a alguien de esa familia se le niega el derecho a pertenecer, queda excluido, entonces el alma trata de volver a establecer ese orden.


Y, entonces, ¿cuáles son los hechos más comunes por los que alguien en la familia queda excluido?, ¿a quién se le excluye a menudo de la familia?


Por ejemplo, a parejas anteriores de los padres o de los abuelos. Es decir, si el hombre o la mujer se separan de una pareja anterior, significa que ellos excluyen a esa persona de su alma. Es como que se enojan con ella, le hacen reproches, le echan la culpa o la enjuician.


¿Y qué ocurre en la familia? Cuando el hombre o la mujer vuelven a encontrar una nueva pareja, y si con esa pareja tienen un hijo, entonces ese hijo representará a la pareja anterior bajo la influencia de esa alma mayor y, de esa manera, esa alma mayor tratará de ordenar el desorden, y ese proceso es inevitable. Ni los padres ni el hijo saben sobre ese proceso que se está dando. Todos están expuestos a la influencia de esa alma grande y, por lo tanto, a veces ocurre que ese hijo se enferma con una enfermedad similar a la que tenía esa pareja anterior o, por ejemplo, podría querer suicidarse así como lo quería hacer la pareja anterior.


Es decir, se une a esa ex pareja haciendo una relación similar a la que el padre o la madre tenía con esa persona; o sea, en esa relación de pareja ocurren entonces cosas similares a las que ocurrían con las parejas anteriores.


Reestablecer el Orden


¿Se puede resolver esta situación o hay que dejar que transcurra y se termina sanando de esa manera?


Es posible solucionarla si uno sabe, si conoce el orden y si uno reconoce ese orden. Es decir, si el hombre y la mujer -y más tarde ese hijo cuando sea adulto- saben acerca del orden, es posible ordenar el desorden. Un ejemplo de ello es honrando a esa pareja anterior: el hombre le dice a su mujer anterior: “yo no he estado bien, te he amado mucho y me duele que nos hayamos separado”.


Mi experiencia me indica que cuando se separa una pareja no hay culpables, porque nadie es libre de comportarse de manera distinta a la que se está comportando, porque cada uno está unido a su familia de origen.


Dado que en la familia de origen existe un desorden, es como que esa familia lo atrae, lo lleva hacia atrás tratando de ordenar algo, a pesar de que eso nunca lo pueda lograr. Con amor, su familia de origen lo llama y repentinamente pierde a esa pareja de la mirada, se le escapa. Por ejemplo, se comporta como una pareja anterior de sus padres sin saberlo y, entonces, la relación se separa. Ninguna de las dos personas es libre de aquello en lo que está implicado. Luego, los destinos de la familia de origen se vuelven los destinos de esa relación de pareja y ninguno de ellos puede evitarlo ni cambiarlo, aunque quisiera hacerlo.


¿Quién tiene más peso en una situación así? Hay dos familias de origen, una de ellas podría tener un antecedente más difícil que la otra.


Las parejas se unen no solamente porque sus integrantes se aman como hombre y mujer. No es sólo el hombre el que mira a la mujer. Es toda su familia la que la mira y, a veces, esa familia deposita sus esperanzas en la mujer de ese hombre y en la familia de la mujer, para que mediante esa unión se logre un orden, sin que ellos se den cuenta. Quiero mencionar una observación importante. Cuando un hombre y una mujer están completamente enamorados uno del otro, ¿se ven? No. ¿Y qué quieren? Esto que voy a decir es difícil de digerir: ambos quieren morir y eso a razón de una implicancia en su familia de origen.


¿Qué tipo de implicancia en la familia de origen crea inconscientemente ese sentimiento?


Vuelvo a lo de la familia de origen. Supongamos que en la familia de origen alguien quedó excluido, por ejemplo, un hijo abortado. Esto es una exclusión total, pero ese niño queda en el gran alma de la familia; permanece y allí tiene su lugar.


¿Qué ocurre en una familia así? A menudo, la madre quiere seguir a ese hijo para expiar culpas; quiere seguir a ese hijo en la muerte, y eso lo perciben los otros hijos. Entonces, uno de ellos dice: “yo voy en tu lugar”, lo que es una dinámica muy común detrás de las enfermedades. Muchas enfermedades se producen porque uno de los hijos dice: “yo lo hago en tu lugar”. En la mayoría de las veces, lo expresa con respecto a la madre muchas veces también al padre, pero también hay otros contextos. Y ese hijo más adelante se enamora plenamente, y al otro quizás le ocurre lo mismo y entonces mueren juntos. Es decir, es una muerte por amor. Por ejemplo, Tristán e Isolda es un amor que no puede vivir. Un amor así, total, está como en contraposición a la vida, lleva a la muerte.


Publicado el 29 Ago, 2008


© 2010 Revista Mundo Nuevo

CONSTELACIONES FAMILIARES



¿Qué son las Constelaciones Familiares?

Las Constelaciones Familiares son una técnica terapéutica perteneciente a las terapias sistémicas, desarrollada por el terapeuta alemán Bert Hellinger. Se basa en que algunos de nuestros problemas tienen su origen en asuntos no resueltos de nuestro sistema de origen. El amor en las familias requiere de un orden, un orden muy simple, que se basa en dos premisas:

• que los padres sean los grandes y den y los hijos sean los pequeños y tomen.
• y que los hijos no se inmiscuyan en los asuntos de sus padres o ancestros.

Cuando se respeta el orden, el amor puede fluir libremente y la energía de todos los miembros del sistema se orienta a la vida y a su realización.

En las Constelaciones Familiares tratamos de ver dónde se da el principal desorden, en qué asuntos nos estamos inmiscuyendo que no nos corresponden o a quien no se está reconociendo en nuestro sistema y por eso alguien está repitiendo su suerte. Detectando esto, podemos modificar la imagen interna, de forma que todos los miembros puedan tener un buen lugar.

¿Cómo funciona el trabajo de Constelaciones Familiares?

El cliente presenta un problema real que le haga sufrir y que necesite clarificar. El terapeuta le pedirá que escoja un representante para algunos miembros de su sistema de origen o actual y quizá también un representante para él. El cliente los colocará en el espacio siguiendo su intuición. Los representantes se centrarán y posiblemente empezarán a sentir sensaciones, emociones o impulsos de movimiento que pertenecen a las personas a las que representan.

Mediante movimientos o breves frases, el terapeuta acompaña al cliente en el proceso de ver qué sucede entre los miembros de su sistema, quien necesita ser reconocido, respetado, a quien hay que darle un buen lugar o quien está implicado en un asunto que no le corresponde. Hasta que todos los miembros encuentren el mejor lugar posible y las implicaciones hayan salido a la luz.


¿A quién va dirigido el trabajo de Constelaciones Familiares?

Este trabajo puede ayudar a clarificar un buen número de asuntos como son problemas para iniciar o mantener una relación, problemas de salud, trastornos psíquicos o incapacidad para la realización profesional. Únicamente se precisa que el cliente esté centrado y tenga la energía y el coraje necesario para afrontar sus asuntos, mirar y asentir a lo que suceda.

Todos los viernes de 19h a 22h

Dirigidas por: MARIA TERESA FARRENY

Información y Reservas: 636 33 73 91